Descripción del Producto
Era veloz en la pista, en la ruta o en la montaña. Y sobre cualquier auto. Fue campeón de las más importantes categorías del automovilismo argentino en muy poco tiempo: Turismo, Turismo Carretera, Sport Prototipo, TC de Montaña, Mecánica Argentina Fórmula 1. Y cuando se subió a una Maserati en Módena sorprendió logrando excelentes tiempos.
Eduardo Copello fue un piloto excepcional. Lo difícil lo hacía fácil. Llegaba al límite manejando con una pulcritud asombrosa. Los récords caían pulverizados en todos los circuitos donde corrió. Había nacido corredor de autos. Pero lo más importante es que en toda su campaña tuvo la imagen de un gran deportista, sin una mancha que desdijera esa línea de conducta.